Durante las dos guerras mundiales el té era la bebida principal entre los militares, en especial en el ejército británico.
Casi tan pronto como estalló la II Guerra Mundial, YMCA desarrolló comedores móviles para llevar refrigerios a las tropas. Son las conocidas furgonetas de té y galletas (Tea&Biscuits).
Lo hacían en unas furgonetas de segunda mano, que pitaban de verde camuflaje. Se usaron por primera vez en Londres y a finales de 1940 había ya 500 furgonetas que llevaban refrescos y comida a las tropas, los equipos de rescate o las víctimas de bombardeos. Las furgonetas también viajaron a Bélgica y Francia.
Además de servir tazas de té, vendían también cigarrillos, chocolate, pasteles, crema para el pelo y para los dientes y útiles de papelería. También proporcionaron comida y bebida a los que se quedaron sin hogar.
La comunidad mundial de YMCA se hizo realidad a medida que avanzaba la guerra: las furgonetas de té, las de cine y las bibliotecas móviles con el triángulo de YMCA eran algo común. La primera furgoneta de té británica de YMCA llegó a las playas de Normandía el 29 de julio de 1944.
A nivel internacional, la Alianza Mundial de YMCAs amplió su trabajo con prisioneros de guerra y refugiados. En Gran Bretaña, habría programas de educación a gran escala para prisioneros de guerra. Alrededor de mil prisioneros fueron capacitados como maestros de escuela primaria, entrenados para aprobar exámenes de ingreso a la universidad o recibieron capacitación teológica básica.
En los EE.UU., YMCA junto a otras 5 organizaciones nacionales voluntarias fundaron las Organizaciones de Servicio de los Estados Unidos para la Defensa Nacional, hoy conocida como la USO. El personal de YMCA trabajó en los campos de internamiento del país con 110.000 japoneses estadounidenses, organizando clubes y actividades para niños.
En Australia, la YMCA recibió la responsabilidad de “Bienestar social, moral y recreativo de las tropas” y “cuidado de los heridos”. A la YMCA se le otorgó el mismo estatus que a la Cruz Roja, el Fondo de Comodidades de Australia y el Ejército de Salvación.
Esto le dio a YMCA el estatus de “establecimiento militar oficial”- esencialmente, teníamos permiso para operar con tropas en todas las áreas y particularmente en las posiciones de primera línea.
