La situación laboral de los jóvenes en España sigue siendo uno de los retos sociales y económicos más críticos, a pesar de los signos de recuperación económica. España ocupa los primeros lugares en Europa en cuanto a desempleo juvenil, con cifras alarmantes que subrayan las dificultades para integrar a esta población en el mercado laboral.
Según el Instituto Nacional de Estadística (INE, 2024), en el primer trimestre de este año, la tasa de paro juvenil en el grupo de 16 a 24 años fue del 27,7%, superando en 6,5 puntos la de los jóvenes de 16 a 29 años y en 15,3 puntos la de la población general de 16 a 64 años. Este desequilibrio refleja una desconexión preocupante entre las competencias que los jóvenes adquieren y las oportunidades laborales que encuentran. En el tercer trimestre del año la tasa de desempleo juvenil para menores de 25 años alcanzaba el 28,36% (datos del INE).
El informe “Jóvenes y Mercado de Trabajo” (Ministerio de Trabajo, 2024) identifica desafíos clave en el acceso laboral de los jóvenes: la alta temporalidad y los contratos a tiempo parcial caracterizan la precariedad laboral en este grupo, dificultando tanto su estabilidad económica como su desarrollo profesional a largo plazo. La falta de experiencia previa es otra barrera significativa, ya que muchas empresas prefieren contratar a candidatos con trayectoria, lo que genera un círculo vicioso que impide que los jóvenes accedan a su primer empleo.
Además, el desajuste entre la formación académica y las habilidades requeridas por el mercado laboral profundiza estas dificultades, retrasando aún más la integración laboral de los jóvenes. Este contexto, marcado por la inestabilidad, la temporalidad y la falta de experiencia, pone de relieve la necesidad urgente de políticas públicas y programas que ayuden a facilitar una transición efectiva al mercado laboral y promuevan empleos de calidad con formación práctica.
Frente a estos desafíos, el apoyo sociolaboral personalizado se muestra como un recurso indispensable. Programas como la Garantía Juvenil y otras iniciativas de orientación laboral han demostrado ser efectivos al ofrecer acompañamiento adaptado tanto a las necesidades individuales de los jóvenes como a las demandas del mercado laboral actual.
En este contexto, el programa “Empleo 5G”, un proyecto estatal FSE+ de Empleo Juvenil cofinanciado por el Fondo Social Europeo Plus (CCI 2021ES05SFPR001) y el Ministerio de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030, se destaca por su enfoque innovador. Este programa, que estará activo hasta 2029 en siete comunidades autónomas, ofrece itinerarios personalizados para jóvenes de entre 16 y 29 años que no estudian ni trabajan, con el fin de facilitar su incorporación al mercado laboral.
“Empleo 5G” incluye actividades que van desde la capacitación en competencias digitales y habilidades blandas hasta experiencias prácticas como entrevistas rápidas, webinars, mentoring, cartografías digitales de orientación online y talleres grupales, entre otras. Esta variedad de recursos permite que los jóvenes mejoren sus competencias y ganen la confianza necesaria para afrontar los desafíos laborales actuales.
El programa se lleva a cabo desde Córdoba, Málaga, Badajoz, Toledo, Valladolid, Madrid, Leganés, Murcia y Valencia y desde su comienzo en enero de este año, “Empleo 5G” habrá apoyado a 981 jóvenes durante 2024, de los cuales 518 ya han completado exitosamente su itinerario y han logrado acceder a un empleo.
Programas como “Empleo 5G” no solo generan oportunidades laborales inmediatas, sino que también fortalecen la resiliencia y la autoconfianza de los jóvenes, aspectos fundamentales para asegurar su estabilidad y crecimiento en el mercado laboral a largo plazo.
Más información en la web del programa: Empleo 5G | YMCA
