Uno de los proyectos que se llevan a cabo desde nuestro centro en Toledo es “Reforzando el acceso al derecho de saneamiento básico de la comunidad indígena “Carlos Canales”, Sutiaba, León, Nicaragua”,  en colaboración con nuestro socio local ACJ-YMCA Nicaragua.

El proyecto tiene como finalidad mejorar el acceso al derecho de saneamiento básico de 20 familias de la comunidad indígena “Carlos Canales”. Esta comunidad, la cual no dispone de red domiciliaria para el manejo de las excretas, ni de sistema de drenaje para el tratamiento de las aguas servidas, se ha visto mejorada mediante la dotación de 20 nuevas letrinas y la habilitación de 10 baños-duchas, beneficiándose de manera directa 99 personas (41 mujeres, 34 hombres, 10 niñas y 14 niños).

La comunidad se ubica a cinco kilómetros de la ciudad de León (departamento de León, Nicaragua). Una parte importante de las viviendas están asentadas cerca del río San Felipe, exponiendo no sólo a las familias en caso de inundaciones por lluvias, sino también propiciando vectores contaminantes de las fuentes de agua. Casi todas las familias drenan las aguas servidas al cauce del río o a las vías de circulación (peatonal y vehicular), quedando expuestas a mayores problemas sanitarios, principalmente para los niños y niñas.

Además de abordarse el problema de salubridad doméstica y comunitaria, se ha dado mayor protección a las mujeres y niñas, quienes ahora disponen de espacios más íntimos y seguros. Asimismo, se ha capacitado a líderes y participantes del proyecto en equidad de género y en el manejo de condiciones higiénico-sanitarias en la vivienda, con el propósito de garantizar la sostenibilidad de la solución y su réplica efectiva al resto de las familias. La participación efectiva de los líderes, promotores locales juveniles y los propios beneficiarios, sirve como garantía del éxito de las intervenciones y su sostenibilidad más allá del horizonte del proyecto.

La idea-fuerza del mensaje podría venir por este contraste entre el antes y el después, y la mejora que supone especialmente para la salud y la seguridad de mujeres y niñas.

Este proyecto fue financiado por la Consejería de Bienestar Social de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha.